Si entras en los detalles, perderás la perspectiva. Y el tiempo.
En sus memorias tituladas A libro abierto, John Huston decía que sólo había conocido a tres personas que supieran dirigir y actuar a la vez, con brillantez en ambas disciplinas: Charles Chaplin, Robert Redford y Clint Eastwood.
Enlazando con los dos capítulos anteriores, entrar en terrenos en los que no eres un experto, te va a consumir mucho tiempo, vas a ralentizar el trabajo de tus colaboradores, y te acabará generando un sentimiento de frustración.
Esta actitud responde también a la metáfora de que los árboles no te dejan ver el bosque. Y te recuerdo que tú eres el responsable de ese bosque.
Creemos que como profesional del marketing debes tener conocimiento de para qué sirven las herramientas y canales de publicidad y comunicación. Pero si intentas entenderlas en profundidad vas a invertir en los detalles un tiempo que deberías estar dedicando a la estrategia global, al bosque.
Somos conscientes de que muchas de las herramientas que utilizamos ahora son tremendamente atractivas porque parecen de manejo fácil y casi automático. No es así. Es sólo apariencia. Se trata de herramientas muy sofisticadas que es preciso conocer en profundidad para garantizar la rentabilidad de las acciones.
Y por favor, sé que esto te va a sonar fatal: sé humilde. Si sin tener ese profundo conocimiento de herramientas y canales te dedicas a corregir el trabajo de tus colaboradores, probablemente te estés equivocando. Casi seguro.
Lo que tienes que hacer es controlar los resultados, no el camino que conduce a ellos.
LECCIÓN 14 (DE 30) DE MARKETING: No caigas en la embriaguez de datos.
LECCIÓN 16 (DE 30) DE MARKETING: Aunque los viejos rockeros nunca mueren, son sustituidos periódicamente.