Mantén actualizada la imagen corporativa de tu marca.
Desde un punto de vista estrictamente gráfico, la imagen corporativa de tu empresa, como el resto de elementos de comunicación, debe estar en consonancia con el momento para que ésta conecte con tu público objetivo.
Revisa periódicamente tu identidad corporativa y adáptala al momento.
Periódicamente no quiere decir todos los años. Cualquier modificación en una identidad corporativa conlleva una inversión económica muy importante, pues hay que cambiarla en multitud de soportes.
La norma debe ser, si tu marca funciona, los cambios deben ser sutiles.
Cuando irrumpió Internet en el mundo del marketing muchas empresas se vieron obligadas a modificar sus imágenes corporativas para que éstas tuvieran una correcta visualización en pantalla. Y con la invasión de los teléfonos inteligentes, hubo que dar otro repaso a algunas para evitar que, en esos tamaños tan pequeños y con una resolución baja, las identidades corporativas se rompieran visualmente y ofrecieran un aspecto gráfico pobre y chapucero.
Pero no sólo son los cambios tecnológicos los que afectan a tu marca, también los sociales y estéticos.
Tenlo en cuenta. Comprueba que tu marca no lleve hombreras.
LECCIÓN 16 (DE 30) DE MARKETING: Aunque los viejos rockeros nunca mueren, son sustituidos periódicamente.
LECCIÓN 18 (DE 30) DE MARKETING: Pero cualquier día vuelven a estar de moda.